Nota 257: PREMISAS POLÍTICAS PARA UN PROYECTO EDUCATIVO PROGRESISTA

Gregorio Weinberg reveló las ideas educativas de pensadores que influyeron en el pensamiento y la acción educativa a lo largo de la historia de Latinoamérica. Aportó “las pistas Reformistas” que incidieron en el pensamiento de la izquierda latinoamericana abordando el caso Mariátegui. Fue el primer Director de la Biblioteca Nacional del Gobierno de Alfonsín, y buscando material para el X Congreso Provincial de Educación, organizado por el Comité de la Unión Cívica Radical de la Provincia de Buenos Aires (Comisión de Educación) y que se llevará a cabo en Necochea desde el 14 de Octubre, encontramos una perspectiva ideológica para un mapa fiable.
Y de él sobre la educación que queremos: “La sociedad y la ciudadanía deben asumir la responsabilidad por los contenidos y por la forma más adecuada de organización que los tecnócratas y burócratas no han logrado establecer”. “Vamos por una educación pública democrática, universal, gratuita, inclusiva, laica, participativa, formativa, actualizada, flexible, crítica, enriquecedora del lenguaje y abierta a la revolución científica y tecnológica”. Desafió a que “los hombres y mujeres puedan diseñar su propio itinerario educativo de acuerdo con las necesidades, ocupaciones, valores, convicciones y aspiraciones para poder actualizar el concepto de educación para toda la vida”. Una de sus premisas era, respecto a las recomendaciones extranjeras, la de Benito Juarez “Nadie hará por nosotros lo que nosotros no seamos capaces de hacer por nosotros mismos”.
Una buena perspectiva, la ideológica para abordar la cuestión educativa en los albores de la sociedad del conocimiento que requiere decidir no sólo el qué aprender en cada año escolar sino determinar el proyecto educativo para las próximas décadas. En el entorno que se va formando, el conocimiento no es solamente producto sino insumo y el resultado un nuevo conocimiento del que dependen las capacidades competitivas, sociales y económicas.
Desde estas consideraciones habrá mas claridad para enriquecer un debate desde una perspectiva no gremial y que advierta, como Winberg, que la crisis educativa es global y la más seria que haya vivido en mundo.
Son soluciones locales las que aproximan a una mejor solución y la experiencia está demostrando que las más exitosas son los que asumen que las debilidades y fortalezas de una región surgen de la calidad de sus recursos humanos y de la concertación de una política educativa que sea funcional al transito del crecimiento al desarrollo y la calidad y equidad en el sistema. Entonces, inclusiva y de excelencia.
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