martes, 28 de diciembre de 2010

Relato 543: La cuestión nacional, de la Patria y del Bicentenario. A modo de balance autocrítica.

Culmina el año del Bicentenario. Para mí la UCR no asumió sus obligaciones en tanto Partido de la Patria (por su propia historia en la formación de la misma)y conforme a las expectativas planteadas en la primera nota de este año. Y el Gobierno aprovechó bien la oportunidad aunque haya sido solo en la perspectiva de fiestas. Y le trajo réditos, inclusive con posible efecto electoral.
En nuestra mirada era una ocasión propicia para generar el espíritu de misión y el sentido de las epopeyas que nos falta como País. Y obviamente como Partido no nos asumimos como aspirante a conducir políticamente a la Nación, lo que excede al propósito de conquistar un gobierno. Y para vincularse con las nuevas generaciones que en la “individualización” ya apuntada como dato de la época, no abandonaron su compromiso Patrio
.
Para nosotros la cuestión debía pasar de lo emocional a lo desafiante. La generación del Bicentenario que integra los sub 40 del período 2010-2016, tendrá la tarea de gestionar la administración de un período de abundancia económica y grandes retos tecnológicos. No será cualquier generación. Ella se comprometió con la Politica y el Partido y desde 1983 no se vio una irrupción generacional como en este año, lo que evidencia más el faltante político. Este consiste en la obligación de las fuerzas de tener una interpretación y compromiso con la historia y su recuerdo emocional e intelectual.
Varias pueden ser las explicaciones de la debilidad nuestra. Lo conflictivo que lo patrio siempre le resultó a los pensamientos liberales y social demócratas forjado en los tiempos de auge nacionalistas y de guerras que se desataron en nombre de las patria. Al peronismo le fue siempre más fácil gestionar la cuestión por su origen militar y nacionalista, precisamente.
Pero ocurre que una ideología supone una valoración de la historia y un compromiso con la misma. Y una visión sobre el futuro. Y la acción política consiste en ser conectora de ambos tiempos en determinadas ocasiones, el del Bicentenario era el caso. Así lo fue históricamente en nuestro Partido y leer a Gabriel del Mazo nos entrega testimonios de cómo vivían la cuestión los padres del Partido.
La auto critica de un dirigente no implica “un lloro” sino el desafío de la experiencia sobre algo ocurrido, en este caso la anomia nacional, para su corrección. Y estamos a tiempo si asumimos el Bicentenario en un lapso de 6 años que fue el período en el que se forjó la libertad de nuestra Patria (1810-1816). Interpretar a Belgrano y Moreno y sus luchas en relación con sus formaciones políticas resulta desafiante para responder el qué hacer cuando los frutos del País se premian con altos precios en el mercado mundial y vivimos en un tiempo en donde los descubrimientos son mayores en la franja de donde aplicar lo antes descubierto que decubrir nuevas cosas.
"La Representación de los comerciantes" (Moreno) y “Causas de la destrucción o de la conservación y engrandecimiento de las naciones” (Belgrano), son claves progresistas para desentrañar los modos de abordar los desafios contemporaneos desde el orígen de nuetra Patria. Y Moreno y Belgrano, especialmente este último pero también el primero por las decisiones militares que debió promover en consenso con Castelli, ejecutaron acciones de guerra sin ser militares. Del mismo modo que militares fueron Savio y Mosconi con acciones fructiferas en el campo de la economía y tan luego en acero y petroleo. Por eso me ratifico frente a la historia narrada por los K en mayo durante los festejos en eso de "si la función fuera el petroleo, Carlos Ménem es Fernando VII y Kirchner el Virrey Cisneros".
Nota: hasta no hace mucho tiempo las fechas Patrias se celebraban en las escuelas, la plaza y los comité radicales.
PROFESION DE FE DOCTRINARIA DE LA UNION CIVICA RADICAL:
El radicalismo es la corriente histórica de la emancipación del pueblo argentino, de la auténtica realización de su vida plena en el cultivo de sus bienes morales y en la profesión de los grandes ideales surgidos de sus entrañas. Hunde sus
raíces políticas en lo histórico de la nacionalidad y constituye una requisitoria contra toda filosofía material de la vida humana y del destino de la Nación en el mundo. Así el radicalismo se identifica con las más nobles aspiraciones de los pueblos hermanos y lo argentino se articula y adquiere sentido esencial en la lucha emancipadora Sudamericana y en el anhelo universal por la libertad del hombre.
Desde el fondo de nuestra historia, trae el Radicalismo su filiación que es la del pueblo en su larga lucha para conquistar su personería. En la tradicional contienda que nutre la historia argentina, el Radicalismo es la corriente
orgánica y social de lo popular, del federalismo y de la libertad, apegada al suelo e intérprete de nuestra autenticidad,emocional y humana, reivindicatoria de las bases morales de la nacionalidad: es el pueblo mismo en gesta para
constituirse como Nación dueña de su patrimonio y de su espíritu.
Por lo tanto, la Unión Cívica Radical no es n simple partido, no es una parcialidad que lucha en su beneficio, ni una composición de lugar para tomar asiento en los gobiernos, sino el mandato patriótico de nuestra solidaridad nacional, y la intransigencia con que debe ser cumplido el sentimiento radical indeclinable de la dignidad cívica argentina.

http://usuarios.multimania.es/christianlr/01d51a93b410e5819/01d51a93f4141fd0b.html


http://ricardocampero.blogspot.com/2010/01/ano-del-bicentenario-union-civica.html

No hay comentarios: